Un relato de la mexicana Rosy Paláu sobre el poder de las palabras.
«Quién me pudiera entender, Señor. Venir tan lejos para acabar así. De eso tienen la culpa las palabras. Lo mansitas que se ven saliendo de esos labios que se abren como si nos quisieran besar, enseñándonos el aire que se columpia en las palmeras, mientras un sol muerto de la risa se toma su copa llena de nubes con un popote...»
Claves: señor, cosas