Luces y luces. Un relato de Andrew Bernal.
«Quizá por lo que algunos llaman, sin fijarse muy bien en lo que dicen, “economía lingüística”, los habitantes de estas tierras suelen afirmar regularmente “me cortaron la luz” con rostro amargado, cuando la empresa que genera y distribuye a discreción la energía eléctrica envía a uno de sus funcionarios (así los llama) a suspender en nuestro hogar el suministro de tan preciado don de la avanzada era en que vivimos...»
Claus: luz, energía
De la luz en nuestros días
Me encanta la idea de reflexionar sobre expresiones tan sencillas como ésta. La verdad sea dicha, yo también la he usado muchas veces sin pensar en lo limitado del significado que le doy. Me gustó mucho el cuento. Sólo tengo un reparo y es el final, al que le siento algo de... moraleja, o de final de mito. No sé si ése era el efecto que se le quería dar, pero la construcción de este cuento me parece excelente y creo que esa última oración opaca un poco todo el trabajo de las líneas anteriores.
Lina Cuellar
De la luz en nuestros días
Más que un amigo verdadero me encanta cómo se construye una verdad. Que uno como lector se impacta al conocerla por medio de textos como éste. Tan evidente pero no tan precisa en nuestras vidas...
Alejandrina
De la luz en nuestros días
Tratando de obviar el maleintencionado de un evidente escritor frustrado, debo decir que me gusta infinito... qué costumbres estas las nuestras de querer contradecir los refranes populares.
Natalia
Interiores és una col·lecció de contes introspectius en castellà. Tot el que passa, em passa a mi.